Capacítate en Arquitectura Sostenible y construye un mundo mejor

La arquitectura marca la vida de las personas y sociedades. Puede contribuir a un mundo más verde, luminoso, o a una vida más gris y opresiva. La manera en la cual se diseñan los espacios tiene efectos en nuestra salud mental y en el cuidado del planeta entero.

En la década del 70 del siglo XX, la sostenibilidad de la arquitectura empezó a ser repensada por distintos arquitectos como Ian McHarg y Robert Vale. Hoy en día se estima que la mitad de las emisiones con efecto invernadero realizadas provienen de los edificios, una cifra más elevada que la arrojada por el transporte o la industria.

Algunos definen la arquitectura sostenible como aquella que plantea sus diseños y métodos constructivos buscando garantizar el bienestar de las personas, pero a la vez optimizando los recursos y protegiendo el futuro.

No hay una única definición, pero sí es posible estudiar algunos aspectos claves.

 

1. La fusión de la tecnología con conceptos ancestrales

¿Pensaste alguna vez por qué antes se construía de algún modo determinado? Con paredes anchas o angostas, techos altos o bajos, piedra o madera, estos materiales – característicos de zonas determinadas – marcaban ciertas características de la arquitectura de una zona.

Hoy en día, materiales y tecnologías arquitectónicas nacidos en prestigiosos centros de investigación también tienen una enorme influencia en la sostenibilidad de la arquitectura. Y a la vez, se entrecruzan con los métodos milenarios. Así, se mezcla el bambú con ladrillos de plástico reciclado, la madera procedente de bosques certificados con piedras, los paneles elaborados con papel con el adobe.

 

2. La tecnología aplicada a la medición: ¿qué funciona y qué no?

Una edificación ambientalmente sostenible es más sana, consume menor cantidad de energía, es menos costosa, tal como sostiene la Environmental Protection Agency de Estados Unidos. ¿Pero cómo analizar cuán sostenible es nuestro lugar?

A lo largo de estos últimos treinta años se han ido desarrollando indicadores que estudian el consumo de energía, la eficiencia en la construcción, las inercias térmicas de un proyecto.

Es bueno, por ello, tener en cuenta:

  • la durabilidad de los materiales;
  • su eficiencia energética;
  • si su origen es reciclado;
  • el futuro de esos materiales una vez concluido su ciclo de utilidad.

 

Capacitarse es fundamental

¿Cómo aprender sobre arquitectura sostenible sin volver a la universidad? Por más que tengamos un buen recuerdo, posiblemente tu carga de tiempo laboral o familiar no aconseje una vuelta a la Universidad.

Una buena alternativa puede ser el Diplomado en Arquitectura y Urbanismo Sostenibles. Este programa, certificado por la Fundación General de la Universidad de Salamanca replantea el rol del arquitecto en la sociedad, y procura incorporar herramientas de sustentabilidad a su ejercicio profesional.

El diseño arquitectónico bioclimático es una de sus unidades más requeridas, pues es muy práctica y da conocimientos directamente aplicables. Consiste en el diseño de edificaciones teniendo en cuenta las condiciones climáticas y aprovechando los recursos naturales disponibles (el sol, la vegetación, la lluvia y los vientos actúan como nutrientes).

Una vivienda bioclimática consigue ahorrar sustancialmente la energía empleada e incluso prescindir de ella totalmente.

 

Conclusión: un ciclo vital

Michael Braungart y William McDonough tuvieron una gran idea al aproximarse al diseño biomimético (que procura semejarse a la naturaleza) de todoproducto, desde un zapato a una casa, pasando por un automóvil o un libro.

Para McDonough y Braungart, todo producto (una casa o un edificio también) debería alcanzar la sofisticación del diseño de un simple arbol: la cereza que no es recogida por una persona, es comida por el pájaro; y si no, vuelve al suelo y se recicla como nutriente del arbol del que provino.

¿Cómo crees que podría aplicarse esto a la arquitectura?

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